domingo, 2 de agosto de 2009

se armó la olga

*señor director* (¿o te puedo llamar bartolo, a secas?). ecuchame, che. toda mi vida me dediqué a luchar para tener lo mío, es decir, para conservar la plata heredada que no hice nada para conseguir pero que gasto tranquilamente. y ahora resulta que unas bolivianitas de mierda me quieren arruinar el barrio... no puede ser, che. es un horror, una barbaridad. vivo en la calle más linda de buenos aires y unos desubicados se ponen a vender verduras en la ¡plazoleta paul harris! increíble...

Plazoleta Paul Harris
Se ñor Di rec tor:
"La plazoleta Paul Harris está situada en la vereda que corresponde a la esquina de Arroyo 810 y 812; en la vereda de enfrente, se levanta uno de los edificios más emblemáticos de la ciudad: el palacio Estrougamou, y a pocos metros está situado el hotel Sofitel. Es decir, es un lugar que se caracteriza por sus edificios de sólida y hermosa arquitectura.
"Desde hace varios meses tenemos literalmente una feria de venta de verduras y frutas en esa vereda. Son dos puestos que ya habían estado en otras épocas y en la actualidad comercializan durante la mañana y horas de la tarde su mercadería, traída, supongo, por el dueño todas las mañanas.
"En la actualidad, se ha agregado a la venta la preparación de bolsas de verduras que se pelan y fraccionan in situ. Pero, como si eso fuera poco, desde hace varios días tenemos compitiendo con la feria cuatro grandes tabiques de metal utilizados por la policía para proteger edificios durante las manifestaciones o impedir el paso de éstas o de peatones.
"Como ciudadana de la ciudad de Buenos Aires, quisiera que alguien me informe sobre los derechos que me otorga el pagar puntualmente mi impuesto ABL, que, aparentemente, por la ley 23.514, está dedicado, además de a alumbrado, barrido y limpieza, a la contribución territorial, pavimentos y aceras."
Olga Ramos

-y ahora escuchame bien, rosita: antes de llevar esta carta al correo y mandarla a *mi diario* para que la publiquen pasate por la plazita, sí, la plazita de la esquina, es que nunca entendés nada paraguayita del demonio, y comprate dos morrones colorados, un kilo de limones y otro de naranjas y una planta de espinaca...

No hay comentarios:

Publicar un comentario

un lector de la nación dice: